Rinoplastia
La rinoplastia es una intervención quirúrgica destinada a resolver distintos problemas estéticos de la nariz de un paciente.
Descripción del procedimiento
La rinoplastia es una intervención quirúrgica destinada a resolver distintos problemas estéticos de la nariz de un paciente. A través de este procedimiento es posible que usted corrija su dorso nasal, aumentándolo o disminuyendo el tamaño de la giba ósea. Además, su dorso nasal puede requerir la corrección de desviaciones causadas por lesión. La cirugía también le permite modificar su punta nasal, con el fin de otorgarle mayor simetría.
Al finalizar el procedimiento, se suturan las incisiones y se colocan vendajes sobre el dorso y la punta nasal, con el fin de preservar las correcciones realizadas. Asimismo, es necesario emplear apones que mantengan firme la pirámide nasal.
El resultado de la intervención será un mayor equilibrio estético entre los distintos elementos de su nariz, así como una relación más armoniosa entre la nariz y los rasgos faciales en general.
Antes del procedimiento
Es necesario que haya una consulta previa a la rinoplastia. Deberá estudiarse tanto la naturaleza como el origen de aquellos rasgos que usted desee corregir. Durante la consulta, será de suma importancia escuchar sus expectativas. Además, deberá brindar información si posee padecimientos crónicos o toma algún medicamento.
Asimismo, la observación previa ayudará a la detección de problemas de funcionalidad, cuya corrección podría incorporarse a la cirugía. Igualmente, la intervención será planeada de forma que no comprometa funciones básicas como la respiración.
La consulta también tiene el fin de informar al paciente de manera minuciosa acerca del procedimiento. Por tanto, es el momento adecuado para que usted resuelva cualquier tipo de inquietud acerca de las instalaciones, equipos, costos recuperación, entre otros factores implicados en la cirugía.
Después del procedimiento
Una vez realizada la intervención, su nariz podría lucir amoratada, aunque esto no se da en todos los casos. Además, habrá inflamación, por lo cual la nariz se mantendrá obstruida alrededor de tres días. Se recomienda que repose y mantenga su cabeza en alto durante al menos 24 horas. Asimismo, es posible que deba tomar medicación contra el dolor.
Los tapones pueden retirarse en menos de una semana. Los vendajes, en cambio, deben permanecer por un tiempo mayor, con el fin de consolidar las correcciones hechas durante la cirugía. Una vez retirados los vendajes, debe evitarse la exposición a la luz solar. Usted recibirá información acerca del correcto cuidado y aseo que requerirá durante su recuperación. Los resultados de la cirugía se apreciarán con mayor claridad luego de dos semanas.