¿Cuáles abdómenes se deben operar?

La abdominoplastía es el procedimiento mediante el que se extirpa el exceso de piel que hay por debajo del ombligo, además, se realiza un retensado muscular y una readaptación de la piel que perdió sus propiedades. La cirugía se practica tanto en hombres como en mujeres. Según el diagnóstico o motivo para someterse a ella, hay puntos en común para ambos sexos y también diferencias importantes.

En cuanto a los puntos en común, se presentan situaciones en las que primero se pasa por un estado de obesidad importante y posteriormente una pérdida de peso excesiva en la que como consecuencia del estiramiento de la piel por el sobrepeso, esta piel se daña y al adelgazar no recupera su elasticidad. De esta manera, se suele formar una especie de “delantal abdominal” que en algunos casos puede cubrir la zona púbica.

Estos excesos de piel y tejido, además de ser un problema estético, también se convierte en una dificultad funcional y de salud. Los pacientes podrían experimentar irritación en los pliegues de la piel o incomodidad al caminar.

También es común que hombres y mujeres sufran de debilitamiento de las paredes musculares por la edad o la falta de ejercicio que conllevan a la pérdida de masa muscular. Por eso en ocasiones, según el nivel de flacidez se recurre a este procedimiento.

En casos más particulares, hay pacientes que han padecido de hernias umbilicales de gran tamaño que al extirparlas la piel pasa por el mismo debilitamiento y daño que cuando se estira por sobrepeso o embarazo. Para esto podría considerarse también la abdominoplastía, indiferentemente del sexo del paciente.

Otro problema que puede afectar tanto a hombres como mujeres es la diástasis abdominal: Si trazamos una línea vertical a través del abdomen, en línea con el ombligo, identificamos un músculo a cada lado de esa línea. Estos músculos están unidos por un tejido ubicado en medio de ellos, cuando este tejido se daña estamos ante una diástasis abdominal, por tanto, los músculos rectos del abdomen se separan.

La función de ese tejido es mantener el cuerpo erguido, permite la flexión del tronco y la inclinación, facilita la respiración ya que limita el crecimiento del abdomen al inspirar y ayuda a expirar. Por su importancia para todas estas funciones, es recomendable corregir este daño con la abdominoplastía.

Sobre las diferencias de esta cirugía para cada sexo, estas obedecen a cuestiones biológicas que por la naturaleza misma del sexo, cada uno experimenta de forma distinta, como la maternidad que solo sucede en mujeres. Otras diferencias importantes de esta cirugía para hombres y mujeres son:

• Los hombres suelen recurrir más a esta opción cuando el ejercicio y la buena alimentación no son suficiente para obtener el aspecto tonificado, sin cúmulos de grasa y masculino que desean.
• Durante la cirugía y el período post operaratorio tienen más probabilidad de complicaciones los hombres que las mujeres. Aunque aclaramos que las complicaciones son poco frecuentes.
• La cicatriz de los hombres es más horizontal. El nivel de tensión aplicado a los músculos del abdomen es menor que en mujeres porque no interesa marcar tanto la cintura, ya que tendría un aspecto más femenino.
• Las mujeres que optan por la abdominoplastía son principalmente las que han tenido uno o más embarazos y presentan flacidez abdominal como consecuencia del estiramiento de la piel y los músculos durante la maternidad.
• En el caso de las mujeres, si se planea tener otro embarazo, no se recomienda la cirugía. Un nuevo proceso de maternidad puede alterar los resultados alcanzados en el procedimiento.

En pacientes que han experimentado cambios importantes de peso, se recomienda posponer la cirugía hasta que ya haya perdido todo el peso deseado, o al menos no planee perder mucho más peso. Con esto se podrá asegurar la permanencia de los resultados por más tiempo.

De momento no se han establecido diferencias entre hombres y mujeres sobre la efectividad de los resultados. Es decir, que se haya probado que la cirugía tenga más éxito en un sexo u otro. La demanda sí es mucho más significativa en mujeres.

En cada caso el cirujano será sumamente minucioso para examinar la condición del paciente y buscar la técnica quirúrgica que mejor se adapte a las variables de ese abdomen en específico. Así, se logrará la satisfacción del paciente con su nueva apariencia.