Tratamiento de bótox facial
El bótox es el nombre de una marca comercial que normalmente se conoce para denominar a la toxina botulínica tipo A. Esta es una sustancia hecha de una proteína natural que es purificada para inyectarse en pequeñas dosis en el rostro como tratamiento contra las arrugas. Ayuda a atenuar las arrugas por líneas de expresión y previene que aparezcan nuevas.
Comúnmente se confunde con los rellenos de ácido hialurónico, sin embargo, el bótox no aporta volumen como los rellenos, sino que su función es relajar el músculo por tiempo determinado para disminuir visiblemente las arrugas por líneas de expresión. Le da una mejor textura a la piel y el rostro se ve más luminoso sin perder su apariencia natural. En algunos casos particulares que las personas tienen un efecto de rostro de muñeca o paralizado se debe a que se suministran dosis con mucha frecuencia, es decir, por sobre utilización del tratamiento.
La edad hace que las arrugas del entrecejo, la frente y las “patas de gallo” sean cada vez más notorias, lo que le da una apariencia de envejecimiento, cansancio o de enojados. Al tratarse de líneas que se marcan y profundizan producto de la movilidad de los músculos del rostro cuando reímos, nos enojamos, bostezamos o lloramos, es difícil escapar de ellas. El bótox ha resultado un tratamiento muy eficaz para atenuar estas arrugas y relajar el músculo de manera que evita que aparezcan nuevas. También se ha utilizado como alternativa del levantamiento de cejas y el estiramiento de frente.
Los resultados del tratamiento dependerán de varios factores como la destreza del médico y su técnica de inyección, las características del músculo del paciente y qué tan notorias sean las arrugas. El efecto de mejor apariencia puede tardar de 4 meses o hasta 1 año en pacientes más jóvenes. No se recomienda utilizar bótox en personas con enfermedades neuromusculares, alérgicas al huevo o en condición de embarazo.
Con respecto a los posibles efectos secundarios, que es una de las preguntas más frecuentes de los pacientes, estos son raros pero en algunos casos podría haber leves dolores de cabeza en horas posteriores a la aplicación. También se ha registrado retención de líquido en los párpados superiores, las famosas bolsas en los ojos, pero este efecto es temporal y muy poco frecuente. El bótox tiene contacto con los nervios musculares, no con los nervios sensoriales por lo que no tiene ninguna afectación en la sensibilidad de la zona tratada.
La principal recomendación antes de realizarse un tratamiento de bótox es evacuar todas sus dudas, no se quede con una pregunta y consulte al médico todo lo que no tenga claro o no comprenda sobre el tratamiento. Además se debe suspender el consumo de medicamentos que afectan la circulación como aspirinas. Si consume suplementos nutricionales con vitaminas E es recomendable no consumirlos previo a la aplicación de bótox para evitar la aparición de moretones.
En cuanto a los cuidados posteriores al tratamiento, se trata más bien de algunas prohibiciones para no afectar los resultados finales. No se debe masajear la zona en las primeras 24 horas posteriores al tratamiento, tampoco se recomienda visitar piscinas o saunas, no ingerir alcohol en grandes cantidades, preferiblemente no hacerlo del todo, y no practicar actividades físicas y evitar mover la cabeza, sobre todo los movimientos hacia abajo.
La aplicación del bótox puede tardar unos 20 minutos y no se caracteriza por ser muy doloroso, sin embargo, en pacientes muy sensibles se puede aplicar una anestesia tópica. Una de sus ventajas es que es una alternativa no quirúrgica para tratar las líneas de expresión, y su efecto, aunque es menos duradero que el de la cirugía, perdura por varios meses y su recuperación es bastante rápida.
Consulte con el médico todas sus dudas y evalúe todos sus factores, si el bótox es la mejor opción, de seguro quedará con gran satisfacción al ver el resultado y recuperará la apariencia joven y fresca en su rostro.