Antes y después: recomendaciones para una cirugía de abdomen
Las cirugías estéticas de abdomen se practican para extirpar grasa o excesos de piel en personas con sobrepeso o aquellas que han perdido peso y como consecuencia tienen tejidos que simulan la forma de un delantal en la parte baja del vientre. En estos casos se habla de abdominoplastia.
Otro tipo de cirugía abdominal es la liposucción que consiste en extraer grasa del abdomen. En ocasiones se combinan ambos procedimientos, se realiza primero la liposucción y luego se elimina el exceso de tejido y se tensan los músculos abdominales.
Para cualquier tipo de cirugía estética de abdomen se deben seguir algunos cuidados antes y después del procedimiento. Recuerde que estas cirugías tienen cierto grado de complejidad, por lo que se deben acatar las indicaciones del médico de forma mucho más estricta y controlada.
Antes de las cirugías de abdomen se recomienda:
- En caso de ser un paciente con obesidad, lo ideal es que procure perder una cantidad importante de peso antes de someterse a la cirugía para reducir el riesgo de complicaciones.
- Debe practicarse un chequeo médico para descartar cualquier tipo de condición que pueda traer complicaciones, como cardiopatías, enfermedades pulmonares o de coagulación.
- No debe fumar dos semanas antes del procedimiento, ya que el tabaco no permite la correcta oxigenación del cuerpo y podría dificultar el proceso de cicatrización posterior.
- Utilice un jabón germicida días antes del procedimiento, esto ayudará a que la piel se encuentre más limpia y reducir la probabilidad de contraer una infección.
En la etapa de recuperación post operatoria debe seguir los siguientes consejos:
- La zona tratada se cubre con un vendaje que debe utilizar al menos por 24 horas. Posteriormente se coloca una prenda comprensiva o faja que le protege de golpes, roces y reduce la inflamación. Utilícela por al menos cuatro semanas, o el tiempo que el cirujano le indique.
- No moje la herida hasta que le hayan retirado los puntos para evitar humedad en la zona.
- Debe mantener reposo en cama mínimo dos días después de la cirugía.
- Podrá volver a sus actividades laborales cuando se le retire el drenaje linfático, alrededor de siete días después. Siempre y cuando su trabajo no implique actividades de esfuerzo físico.
- Realice ejercicios suaves como caminar, no puede practicar deportes de alto impacto o esfuerzo físico. Tampoco se recomienda permanecer totalmente sedentario; caminatas breves cada día le ayudarán a mejorar la circulación.
- Hidrate la zona abdominal con cremas o aceites durante el tiempo que utilice la prenda compresora para evitar que se reseque la piel.
- Al dormir, mantenga una postura levemente inclinada de la cabeza y la espalda, coloque también una almohada debajo de las rodillas para que las piernas queden flexionadas.
- Evite hasta donde sea posible conducir, ya que la posición en el vehículo podría generar tensión en el abdomen.
- Coma liviano y en cantidades pequeñas varias veces al día. No consuma muchos alimentos que lo hagan sentirse muy lleno, así evitará la tensión del abdomen producto de la saciedad o la indigestión.
Recuerde que cada paciente es un caso particular y las indicaciones del médico pueden variar de una persona a otra según las condiciones generales de salud y la complejidad de la cirugía. Las cirugías de abdomen por su nivel de riesgo y dificultad dependen en gran medida de los cuidados posteriores para garantizar los mejores resultados, por lo que la responsabilidad y compromiso del paciente son fundamentales para su satisfacción personal.